La Conexión entre Neurociencias, Cuerpo y Movimiento: La Importancia del Desarrollo de la Propiocepción y la Enterocepción como Nuevos Sentidos
Por: Ignacio Monti
2 agosto, 2023

Introducción

En el fascinante mundo de la neurociencia, la exploración de la relación entre el cerebro, el cuerpo y el movimiento ha revelado descubrimientos sorprendentes y complejas interconexiones. Tradicionalmente, hemos conocido los cinco sentidos externos: vista, oído, olfato, gusto y tacto, como las principales ventanas a través de las cuales experimentamos el mundo que nos rodea. Sin embargo, en las últimas décadas, los investigadores han revelado la existencia de dos nuevos sentidos: la propiocepción y la enterocepción. Estos sentidos internos desempeñan un papel esencial en nuestra percepción del cuerpo y del movimiento, y su desarrollo adecuado resulta crucial para nuestro bienestar y funcionamiento óptimo. En este artículo, profundizaremos en la relación entre las neurociencias, el cuerpo y el movimiento, y exploraremos la importancia de la propiocepción y la enterocepción en nuestro día a día y en diversos ámbitos de la salud y el rendimiento humano.

I. El Cuerpo y el Cerebro: Una Interacción Compleja

Para comprender la conexión entre neurociencias, el cuerpo y el movimiento, es fundamental conocer cómo nuestro cerebro procesa y responde a las señales sensoriales que recibe del cuerpo y del entorno. El sistema nervioso central, compuesto por el cerebro y la médula espinal, es el epicentro de la percepción, la cognición y la toma de decisiones. El cerebro procesa y organiza la información sensorial que proviene de los órganos sensoriales y los sentidos, y en respuesta, emite órdenes para llevar a cabo movimientos y acciones.

La interacción entre el cerebro y el cuerpo se lleva a cabo a través de complejas vías neuronales. Las neuronas sensoriales, ubicadas en todo el cuerpo, transmiten información a través de impulsos eléctricos hacia el cerebro y la médula espinal. Estos impulsos son interpretados y traducidos en sensaciones y percepciones que conforman nuestra experiencia consciente del mundo y de nuestro propio cuerpo.

II. Los Cinco Sentidos Tradicionales: Puertas al Mundo Externo

Antes de sumergirnos en los nuevos sentidos, es importante recordar la importancia de los cinco sentidos tradicionales: vista, oído, olfato, gusto y tacto. Estos sentidos son cruciales para nuestra supervivencia y nos proporcionan información valiosa sobre nuestro entorno externo. A través de la vista, percibimos la luz y las formas, el oído nos permite escuchar sonidos y vocalizaciones, el olfato nos conecta con los aromas y fragancias, el gusto nos permite saborear los alimentos, y el tacto nos ofrece una amplia gama de sensaciones táctiles.

III. Propiocepción: La Conciencia del Cuerpo en Movimiento

La propiocepción, a menudo llamada el sexto sentido, es el sentido interno que nos permite percibir y conocer la posición y el movimiento de nuestro cuerpo sin depender únicamente de la información visual o táctil. Este sentido es fundamental para nuestra coordinación motora, equilibrio y postura. Es responsable de que podamos caminar, correr, escribir o realizar cualquier actividad física con precisión y sin necesidad de mirar constantemente nuestras extremidades.

Los receptores propioceptivos se encuentran en músculos, tendones, ligamentos y articulaciones. Estos receptores especializados detectan la tensión, elongación y posición de nuestras estructuras musculoesqueléticas, y envían esta información al cerebro. En respuesta, el cerebro ajusta y modula la actividad muscular para mantener una ejecución fluida y precisa de movimientos. La propiocepción también es esencial para percibir la fuerza necesaria en actividades cotidianas, como agarrar objetos sin aplastarlos o soltarlos sin dejarlos caer.

IV. Enterocepción: El Mundo Interno y sus Sensaciones

Si la propiocepción nos conecta con la percepción del cuerpo en movimiento, la enterocepción es el sentido interno que nos permite sentir y comprender las sensaciones y estados internos de nuestro cuerpo, incluyendo nuestras emociones y necesidades fisiológicas. La enterocepción está asociada a la percepción de señales internas, como la saciedad, el hambre, la sed, el dolor visceral y otras sensaciones relacionadas con nuestras funciones orgánicas.

Los órganos internos, como el corazón, los pulmones, el estómago e intestinos, están equipados con receptores especializados que envían señales al cerebro sobre el estado de estos órganos. Esta retroalimentación ayuda al cerebro a regular nuestras funciones corporales, mantener un equilibrio homeostático y responder a nuestras necesidades fisiológicas y emocionales. La enterocepción es, por tanto, esencial para nuestro bienestar general y nuestra capacidad de autorregularnos.

V. Desarrollo de la Propiocepción y la Enterocepción en la Infancia

El desarrollo adecuado de la propiocepción y la enterocepción comienza en la infancia. A través de la exploración y el movimiento, los niños desarrollan gradualmente una mayor conciencia de su cuerpo y sus sensaciones internas. Jugar al aire libre, trepar, saltar, rodar, y participar en actividades que involucren el uso activo de sus cuerpos, ayuda a establecer conexiones neuronales fundamentales para el desarrollo propioceptivo.

Por otro lado, el aprendizaje a reconocer y nombrar emociones, la expresión emocional adecuada y la práctica de la atención plena y la meditación pueden favorecer el desarrollo de la enterocepción. Una mayor conciencia de las señales internas facilita una mejor regulación emocional y una mayor comprensión de nuestras necesidades y estados internos.

VI. La Importancia de la Propiocepción y la Enterocepción en la Salud y el Rendimiento Humano

Tanto la propiocepción como la enterocepción son esenciales para la salud y el rendimiento humano en diversos aspectos:

1. Equilibrio y Coordinación: La propiocepción es fundamental para mantener un equilibrio adecuado y una coordinación eficiente durante el movimiento. Es especialmente relevante en deportes, danzas y actividades que requieren un alto grado de precisión motora.

2. Prevención de Lesiones: Una buena propiocepción ayuda a prevenir lesiones, ya que permite detectar y corregir desalineaciones y movimientos inadecuados, reduciendo la carga en estructuras vulnerables.

3. Rehabilitación: En procesos de rehabilitación, el desarrollo de la propiocepción es crucial para recuperar funciones motoras y reducir la probabilidad de recaídas.

4. Conciencia Corporal: Tanto la propiocepción como la enterocepción promueven una mayor conciencia corporal, lo que puede resultar en una relación más saludable con el cuerpo y una mejor imagen corporal.

5. Regulación Emocional: La enterocepción contribuye a una regulación emocional efectiva al permitirnos identificar y comprender mejor nuestras emociones y necesidades internas.

6. Salud Mental: La enterocepción está relacionada con una mayor conciencia de las señales de estrés y ansiedad, lo que puede facilitar una respuesta temprana y la adopción de estrategias de afrontamiento.

VII. Cultivando la Propiocepción y la Enterocepción

A medida que comprendemos la importancia de la propiocepción y la enterocepción, surge la pregunta de cómo podemos cultivar y desarrollar estos sentidos internos. Aquí hay algunas estrategias:

1.Movimiento Consciente: Practicar actividades que fomenten la atención plena al movimiento, como TPH, yoga y  tai chi, puede mejorar la propiocepción y la enterocepción.

2. Ejercicios Sensoriales: Realizar ejercicios que estimulen la percepción de sensaciones internas, como la respiración profunda y la exploración táctil, puede ayudar a desarrollar la enterocepción.

3. Juego y Exploración: Estimular la propiocepción en niños a través del juego activo, la exploración táctil y la práctica de habilidades motoras básicas.

4. Mindfulness: Practicar la atención plena y la meditación puede aumentar la conciencia de las sensaciones corporales y emocionales.

5. Alimentación Consciente: Desarrollar una mayor conciencia de las señales internas de hambre y saciedad al comer de manera consciente.

Conclusion

La relación entre neurociencias, el cuerpo y el movimiento es un vasto campo de estudio que sigue revelando secretos asombrosos. Los nuevos sentidos de propiocepción y enterocepción añaden profundidad a nuestra comprensión de cómo percibimos y experimentamos el mundo y nuestros propios cuerpos. Su desarrollo adecuado es fundamental para la salud, el bienestar y el rendimiento humano. A medida que continuamos explorando estas conexiones, nos acercamos a una visión más completa y rica de la experiencia humana.

Referencias:

El libro que tu cerebro no quiere -David del Rosario – Ed Urano

Neurociencia del cuerpo, cómo el organismo esculpe el cerebro. Nazareth Castellanos. Ed. Kairos

También te puede interesar:

La génesis de Terapia Postural Holística

La génesis de Terapia Postural Holística

La Terapia Postural Holística o TPH es el resultado de un viaje personal y de una experiencia de casi 20 años. A la distancia, puedo ver que ha sido un rompecabezas que ha llevado todo ese tiempo armar y que no podría haber sido de otra forma.

leer más
La ira y el cuerpo: cómo aprender a gestionar nuestros registros emocionales

La ira y el cuerpo: cómo aprender a gestionar nuestros registros emocionales

La ira es una emoción intensa que no solo afecta nuestra mente, sino también nuestro cuerpo. Se manifiesta a través de tensión muscular, opresión en el pecho y cambios en la respiración. Ignorar estos registros corporales puede generar bloqueos y malestar. En lugar de reprimir o reaccionar impulsivamente, podemos aprender a reconocer la ira y gestionarla de manera más saludable a través de la respiración consciente, el movimiento corporal y la expresión adecuada. Habitar el cuerpo sin tensión nos permite transformar la ira en equilibrio y bienestar.

leer más
La conexión entre el dolor corporal, el sistema nervioso central y las emociones

La conexión entre el dolor corporal, el sistema nervioso central y las emociones

«El dolor corporal es una experiencia compleja influenciada por el sistema nervioso y las emociones. Para abordarlo de manera efectiva, es fundamental un enfoque holístico que combine el trabajo postural, la liberación emocional y la reeducación del sistema nervioso. Este proceso nos ayuda a conocernos mejor y a interpretar los mensajes que nuestro cuerpo nos envía. Crear espacios de conexión y escucha interna es el primer paso para recuperar un movimiento más natural y equilibrado.»

leer más
La sobreadaptación al cansancio: Cuando dejar de sentir nos aleja del bienestar

La sobreadaptación al cansancio: Cuando dejar de sentir nos aleja del bienestar

En la sociedad actual, hemos normalizado la sobreadaptación al cansancio hasta el punto de ignorar las señales de nuestro cuerpo. La cultura de la hiperproductividad nos empuja a utilizar estimulantes para mantenernos despiertos y medicamentos para dormir, acallando los avisos de agotamiento. Byung-Chul Han, en La sociedad del cansancio, describe cómo esta autoexplotación nos lleva al colapso. A diferencia de una máquina, nuestro cuerpo no tiene piezas de repuesto, y las consecuencias de ignorarlo pueden ser devastadoras: enfermedades crónicas, ansiedad, dolores corporales y lesiones invalidantes. Sin embargo, el cuidado diario con hábitos simples puede prevenir estos efectos. Escuchar nuestro cuerpo y atender sus necesidades es clave para una vida más saludable y plena.

leer más